Vos decís que sufrís
porque amás y no sos correspondido,
no comés por miedo a engordar, no
usas la misma ropa dos veces porque tal persona te vió anteriormente usando esa
ropa. Tenés mil motivos para llorar
y mil motivos para deprimirte,
pero recordá que existen personas que se están en una situación mucho peor a la que vos estás viviendo.